Diseño, montaje y construcción de un laboratorio clínico

Los laboratorios clínicos son sitios de trabajo dinámicos, cambian continuamente de tecnología y de equipos de análisis, así como de múltiples elementos que ha diario se introducen para un mejor funcionamiento y prestación de servicios; por lo tanto su contrucción y diseño deben ser igualmente dinámicos y que se adapten fácilmente al rápido cambio a que los somete la tecnología de punta. En la literatura propia del país es poco lo que se puede encontrar con relación a este tema; la reglamentación de los organismos estatales es poco precisa y no alcanza a profundizar lo suficiente en cada uno de los puntos de importancia. Las siguientes recomendaciones son el producto de una revisión extensa de la literatura mundial y de la visita a 15 laboratorios médicos en 5 ciudades del país, tomando las impresiones de los propios directores o jefes de dichos laboratorios, sobre los diferentes tópicos y aspectos relacionados con el diseño, montaje y construcción de un laboratorio clínico. El propósito del presente trabajo es el de aportar una guía para la construcción o modificación de un laboratorio clínico, sin importar su nivelde complejidad o tipo, dando unas recomendaciones básicas prácticas y sencillas para cada uno de los aspectos estructurales, que aseguren las especificaciones mínimas del ministerio de salud y que garanticen, a quienes las utilicen, la disminución de costos en tiempo y reformas posteriores, y que proporcionen seguridad y funcionalidad.

Pruebas de función tiroidea

Las pruebas de función tiroidea se han convertido en pruebas de rutina en los laboratorios clínicos, así como de común solicitud en las ordenes médicas, lo que hace necesario que los médicos tengan un dominio amplio y útil de las diferentes pruebas y técnicas que se utilizan para evaluar función tiroidea. La mejor comprensión de la fisiología y metabolismo de las hormonas T3 y T4, ha hecho que desde hace algunos años se venga haciendo énfasis en la mayor utilidad y especificidad de las fracciones libres, lo que ha mejorado el diagnóstico y seguimiento de los pacientes y ha llevado a una mejor utilización e interpretación del comportamiento de éstas en el paciente con una determinada enfermedad tiroidea. Se ha definido también la importancia de los anticuerpos, muy especificamente en las enfermedades tiroideas que tienen un componente autoinmune. Estas pruebas deben hacer parte de las pruebas de rutina solicitadas en la evaluación de los pacientes con afecciones tiroideas.